La industria queretana tuvo su peor arranque en materia de productividad de esta naciente década, al reportar un retroceso de 0.8% durante el primer trimestre del año, con lo que además sumó su segundo periodo consecutivo con saldos negativos
Paralelamente, enfrentó el trimestre más caro por hora trabajada desde 2020, al reportar un incremento en el costo unitario de mano de obra por hora trabajada de 7.3%, reportó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
De acuerdo con el Índice de Productividad Laboral y Costo Unitario de Mano de Obra emitido por el INEGI, correspondiente al periodo enero-marzo de 2023, la industria manufacturera queretana rompió una buena racha de dos años consecutivos reportando crecimiento en el arranque del año en materia de productividad, incluso aún con la pandemia, al registrar aumentos de 3.4% y 2% en 2021 y 2022.
Ello, a pesar de que se trabajaron más horas promedio, al registrar un incremento de 1.5% en el índice de horas totales trabajadas en el primer trimestre de 2023 con respecto al de 2022. Incluso, teniendo una mayor plantilla de empleados, ya que se reportó aumento de 3.4% en el índice de personal ocupado total remunerado.
Esta tendencia a la baja en la productividad de la planta fabril manufacturera queretana y altos costos ya se venía perfilando desde el último trimestre del 2022, cuando se reportó una disminución de 1.3% con respecto al trimestre previo.
Y presentaba las mismas características, es decir, aumento en las horas trabajadas, en el personal remunerado y en los costos por horas trabajadas.
Lo anterior, se da a contracorriente de la tendencia nacional, donde en el primer trimestre de 2023, por sector de actividad y con series desestacionalizadas, la productividad laboral —con base en las horas trabajadas— en los establecimientos manufactureros subió 0.2 % a tasa trimestral, señala el INEGI.
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Más aún, expone, en el trimestre enero-marzo del presente año y con respecto al trimestre anterior, el costo unitario de la mano de obra por hora trabajada en las empresas constructoras bajó 0.4 % y en los establecimientos manufactureros incrementó 1.7 por ciento.
Aunque, en la tasa de productividad anualizada, se reportó un incremento de 0.9%.
