En la semana de estreno de la telenovela “Te acuerdas de mí”, el actor Federico Ayos habla de su personaje Gastón Cáceres, y revela detalles de lo que podrá verse en esta producción que comenzó a grabarse justamente en pandemia.
“No me gusta catalogar a los personajes, pero podría decirse que es un villano muy humano, por un lado es del área de relaciones públicas de su familia, por lo que actúa de manera muy simpática, pero paralelamente tiene una relación muy oscura porque su papá no le da el amor que él pretende; su mamá falleció cuando era muy pequeño y a partir de eso empiezan a pasar cosas que tienen que ver con su vida sexual y amorosa”, relata sobre este personaje que reconoce, se ha convertido en un reto por presentar múltiples estados de ánimo.
Sobre la historia, adelanta que Olmo Cáceres (Guillermo García Cantú), tiene tres hijos: Gastón, Marina (María Penella) y Pedro (Gabriel Soto), quien es el hermanastro y a su vez esposo de Marina; “son una serie de embrollos y precisamente esa es el fuerte de la telenovela, la intensidad y la cantidad de historias que contiene”, detalla.
La historia ancla de este melodrama se desarrolla cuando Pedro decide poner fin a su matrimonio por ya no existir lazos de amor y comenzar a tener sentimientos por Vera (Fátima Molina), sin embargo, cede a la presión de su suegro, pero todo se enciende de nuevo cuando conoce a la novia de Olmo, que resulta ese amor al que se vio obligado a olvidar.
“La relación que tendrá Gastón con Pedro está directamente ligada a su padre, pues a pesar de ser adoptado es el preferido de la familia, mientras que yo, que soy de sangre, soy la oveja negra, entonces surgirá una envidia muy grande, lo que dará lugar a conflictos que en efecto tienen que ver con que Gastón pondrá trabas en el caminó y será una molestia en la relación de Pedro con Vera”, explica.
Sobre Gastón, abunda que será un personaje con el que el público inevitablemente se conectará de manera entrañable, por lo que podría no odiarlo, sino más bien esperar que reivindique su camino para quererlo más; “es el clásico que dices ‘si es buen chavo, ¿por qué hace esas cosas?’”.
Al cuestionarle sobre qué parte de su personalidad le confirió a Gastón, confiesa que la rebeldía es algo que ha caracterizado sus trabajos anteriores. “Desde la adolescencia me gusta ser y sentirme rebelde, y creo que es un poco el factor común que he impreso en mis personajes”.
En tanto, lo que definitivamente considera como lejos de su personalidad es “la parte pedante”, pues asegura que la soberbia no es en lo absoluto el estilo de su persona.
Luces, cámara…
El arranque de esta grabación surgió precisamente hace tres meses, por lo que la producción ha tenido que trabajar de manera atípica y cuidando todas las medidas sanitarias para evitar el Covid-19, además de garantizar la salud de quienes conforman el equipo.
“El casting fue a distancia y los trabajos de mesa se estuvieron haciendo vía zoom. La pandemia ha sido y sigue siendo un desafío para sacar todo adelante; nos ha tocado grabar en locaciones como Guanajuato y Huatulco, en las que hemos estado con medidas extremas de protección e higiene y ha sido difícil, sobre todo en Huatulco por tener que usar el cubrebocas con el calor, pero sabemos que de esa manera estás cuidando al compañero”, dice y agradece poder trabajar aún en estos tiempos.
Finalmente, al no presentar el clásico acento propio de su origen argentino, asegura que ha trabajado en ello, además de agradecer la manera en la que ha sido acogido en este país; “me han abierto los brazos de una manera increíble; me han dado amor y no solo respecto a trabajo, sino que también he tenido amistades divinas y he podido comenzar una carrera por lo que estaré eternamente agradecido. Hoy México es mi casa”, puntualiza.
