La rectora Teresa García Gasca aseguró que 26 personas han sido rescindidas de contrato por actos de violencia de género en la Universidad Autónoma de Querétaro.
Se trata de trabajadores docentes y administrativos y las denuncias han sido presentadas ante la Unidad de Atención a Violencia de Género o de manera directa a la oficina del abogado general.
La rectora refirió que la oficina del abogado general de la UAQ ha recibido 43 denuncias del 2018 a lo que va del 2022, ya sea a través de la UAVIG o de manera directa, de ellas, en 26 casos se ha determinado el terminar con la relación laboral de las personas acusadas.
“Es importante que lo sepan, porque no se está pasando por alto, lo que pasa es que no siempre podemos informar porque hay situaciones de confidencialidad”.
García Gasca sostuvo que esta tarde se llevará a cabo la primera mesa de diálogo con integrantes de la comunidad estudiantil para dialogar respecto a las demandas que mantienen el paro a la institución. Sostuvo que, aunque no se ha entregado el pliego petitorio de manera formal, ya han analizado lo que se ha difundido a través de canales digitales de comunicación y consideran que es factible atenderlas o incorporarlas a cuestiones ya existentes.
“El procedimiento es perfectible, hay que ir avanzando en ese sentido y este movimiento nos lo permite: valorar los problemas, los defectos que tiene nuestro proceso para mejorarlo”.
La rectora reconoció que un área de oportunidad es la vinculación con autoridades externas a la UAQ, puesto que se les ha cuestionado el porqué no acuden a denunciar ante la Fiscalía, cuando la única persona que puede hacer dicho procedimiento es la afectada.
“La mayor parte de las demandas son posibles, incluso son acciones que ya se llevan a cabo y en este tenor, habría que avanzar, ver cómo mejoramos aún más el procedimiento. Desde luego, una parte importante donde tenemos una laguna es en los procedimientos que tienen que ver con las autoridades externas (…) la Universidad no puede denunciar directamente, tiene que ser la persona afectada y nosotros sólo podemos hacer acompañamiento cuando la víctima así decide hacerlo”.
Respecto a las declaraciones que ha hecho sobre la posibilidad de que se pierda el semestre, señaló que este riesgo existe dadas las características de este periodo que es más corto en comparación con el primero del año; refirió que la última huelga de 2016 y el inicio de la pandemia de Covid-19 sucedieron durante la primera parte del año, por lo que los ajustes al calendario estuvieron relacionados con esos tiempos. La rectora aseguró que esta situación no es una amenaza, sino una preocupación real.
