El municipio de El Marqués se acerca a su meta de contar con 300 policías y cumplir con las necesidades de seguridad que registra el municipio, sobre todo ante su crecimiento demográfico.
Lo anterior lo sostuvo el edil Mario Calzada Mercado, al encabezar la ceremonia de graduación de cadetes de la décima quinta generación de la Secretaría de Seguridad Pública y Tránsito Municipal, evento en el que urgió a los oficiales a siempre estar a la altura de las necesidades de El Marqués.
“(Son) la parte más cercana al ciudadano, a quien ven todos los días en la calle y el mensaje fue en el sentido de compromiso, de lealtad, de transparencia, de que queremos una corporación que esté a la altura de lo que hoy ya es el municipio… de nada sirve hacer grandes inversiones en edificios, en patrullas, en infraestructura, en patrullas, en chalecos, en equipamiento, si la parte humana no se tiene”.
Antes de solicitar licencia, para contender por la releección, el alcalde resaltó que en esta ocasión se tomó protesta a 30 cadetes quienes desde ayer se incorporaron a las fuerzas policíacas.
“Es una manera de abatir un rezago que teníamos en el área en materia de seguridad, en cuanto al número de elementos.. Con estos estaremos llegando a los 270 policías… vamos a iniciar a capacitar una siguiente generación, y así seguiremos hasta abatir este gran rezago”.
Apuntó que los puntos en los que deberán reforzar la seguridad será parte de las estrategias de la SSPyTM, para lo que se deberá realizar diferentes análisis y atender las zonas con mayor incidencia delictiva.
El secretario de Seguridad Pública Municipal, general Carlos Bravo Acosta, exhortó a los nuevos elementos a sumarse con compromiso, lealtad y disciplina a las labores de la corporación, siempre priorizando su responsabilidad de velar por la seguridad y el patrimonio de las familias.
SIEMPRE HE QUERIDO SER POLICÍA
Entre quienes aprobaron los cursos de formación inicial se encuentra Irma Noemí, quien narró a DIARIO DE QUERÉTARO como ser policía era un sueño que tenía desde niña y finalmente, se hizo realidad.
“Siempre quise estar en la milicia, pero no se pudo y ahorita concreté este paso más, con apoyo de mi pareja Carlos y mi familia. Ahorita estoy aquí, superando mis retos”.
Pese a que velar por seguridad era su sueño, tomar el curso que ofreció la SSPyTM le planteó diferentes retos, pero gracias a que los enfrentó, dijo, puede superarse, al igual que el resto de los elementos.
GRANDES EXPECTATIVAS
Gerardo, resaltó que fueron los tres años que cumplió en el Servicio Militar lo que lo hizo darse cuenta de cuál era su verdadera vocación.
Narró que en vez de desanimarlo, su familia siempre le brindó su apoyo, pues confirmaron que se trataba del camino que debía seguir e incluso, ya hasta uno de sus sobrinos le ha contado que quiere seguir sus pasos.
“La Academia nos dio muchos conocimientos… los instructores fueron parte de que esta instrucción nos sirviera mucho y la familia, más que nada, que también me apoyó todo el tiempo”.
Reflexionó antes de unirse al resto de los elementos que, como él, concluyeron su formación.
