El daño al erario público del municipio de Pinal de Amoles ascendió a un millón 715 mil 907.16 pesos durante 2020, esto de acuerdo con la revisión a la cuenta pública de 2020 por parte de la Entidad Superior de Fiscalización del estado (ESFE); esta situación derivó, incluso, en la detención del entonces alcalde de Pinal de Amoles, Isidro “N”.
De acuerdo con la cuenta pública, una de las tres observaciones realizadas tuvo que ver con la entrega de ayudas sociales a la población por concepto de materiales de construcción por 387 mil 760.06, apoyos económicos por 329 mil 274 pesos, productos alimenticios (pollo fresco) por 827 mil 524.25 pesos y despensas por 14 mil 999.96 pesos.
Lo anterior, según la ESFE, no se soporta en ningún programa y, consecuentemente, carece de reglas de operación, por lo que no existe evidencia documental que compruebe las entregas de dichos apoyos, ni se cumple con los requisitos establecidos en la ley para el manejo de los recursos públicos de Querétaro.
Asimismo, se percibió el pago de servicios médicos por 156 mil 348.89 pesos sin cumplir con lo establecido en el convenio colectivo de trabajo celebrado entre el municipio de Pinal de Amoles con el Sindicato auténtico de trabajadores del municipio de Pinal de Amoles.
De lo anterior, se dio cuenta al órgano interno de control de Pinal de Amoles, quien en septiembre de 2020 presentó una denuncia ante la Fiscalía Especializada en el Combate a la Corrupción por diversas irregularidades en la contratación del servicio médico que se brindaría a los trabajadores del Ayuntamiento.
Por lo anterior, la fiscalía inició una carpeta de investigación por el delito de peculado, motivo por el cual se vinculó a proceso a Isidro “N” y Luis Gerardo “N” por desviaron diversas cantidades de dinero para el pago al proveedor.
Aunado a ello, la ESFE recibió una denuncia de un particular por estos hechos, la cual se encuentra en trámite, de acuerdo con Enrique de Echávarri Lary, titular de la Entidad Superior de Fiscalización (ESFE). “Denuncias tenemos una en Pinal de Amoles, que está en tránsito, es una denuncia no es una revisión y la estamos atendiendo”, dijo.
A las dos observaciones anteriores, se sumó una más por detectar la falta de un correcto estudio de mercado que permitiera obtener las mejores condiciones económicas, lo que generó la contratación de trabajos que contenían insumos cuyo precio era elevado, respecto a las condiciones existentes en el mercado, así como otros por debajo de las condiciones del mismo. Esta situación se identificó en las obras de rehabilitación de la calle Francisco I. Madero, en Ahuacatlán de Guadalupe, y la pavimentación de la calle Cedro, en el barrio La Loma, en la cabecera municipal.
Cabe señalar que como parte de esta cuenta pública no se obtuvieron recomendaciones, aunque sí las tres recomendaciones.
