Querétaro regresa a clases. Fueron 460 centros escolares de educación básica en el estado los que se incorporaron para este ciclo, cuyos protocolos sanitarios fueron realizadas a cabalidad, sin embargo, dentro del listado de instituciones que regresarían el 10 de enero, algunas escuelas, sin mayor explicación, se mantuvieron cerradas o personal de estas refirieron que ya habrían comenzado clases con anterioridad.
Se trata de las secundarias Ricardo Flores Magón y Mariano Escobedo, así como la primaria Ignacio Mariano de las Casas, instituciones que se mantuvieron cerradas durante este proceso de incorporación escolar, bajo la estrategia "De vuelta a la escuela" y que se encuentran en las listas de ingreso para estas fechas.
Niñas, niños y adolescentes se hicieron presentes en los distintos institutos educativos de carácter público en la entidad, en el que se destacó la implementación de medidas sanitarias con los estudiantes, quienes ingresaron de uno a uno a las escuelas, al pasar por la revisión escolar con el porte del cubrebocas, la medición de temperatura y el uso de gel antibacterial.
Al respecto, autoridades escolares de la Unidad de Servicios Para la Educación Básica en el Estado de Querétaro (USEBEQ) se encargaron de visitar los diferentes recintos y zonas escolares para la corroboración de estas medidas, mismas que están señaladas en carteles y anuncios de las escuelas, afuera de los salones, dirección e incluso baños, con la intención de que se conozca en todo momento lo que debe hacerse.
"En Secundarias Técnicas tenemos 16 en el estado y desde la semana pasada han sido estas visitas en lo que fueron los simulacros. Hubo ese previo para que justamente las escuelas fueran revisando aquellas acciones que habría que tomar en cuenta para el regreso", refirió Adriana Margarita Zárate Granados, jefa del Departamento de Secundarias Técnicas.
Añadió que durante el fin de semana se hicieron revisiones y atención respecto a detalles para dicho regreso, principalmente el diálogo con padres de familia, a quienes se les avisó de todos los elementos planteados para un regreso a clases óptimo, y así garantizar y dar certeza de seguridad con sus hijos.
"Tuvimos diálogo con los padres de familia para que nos autorizaran si sus hijos vendrían o no. Tenemos dos maneras, que es de manera presencial y en línea, que ya lo venimos trabajando y bueno, la decisión de la mayoría fue la de regresar", comentó José Luis Guerrero Anaya, supervisor de la zona 6 de secundarias.
Comentaron que respecto al rezago educativo, una de las tareas fundamentales de las y los profesores es la de generar diagnósticos, observar a los estudiantes y con ello trabajar los distintos aprendizajes, priorizando los conocimientos abordados en el ciclo escolar anterior para su reforzamiento.
“Así que el rezagado y todos aprendizajes que no se han podido atender, los maestros han estado mes con mes en las reuniones de consejo técnico, de consejo de zona, las escuelas que conforman dicha zona, buscando y siguiendo con la implementación de estrategias. Definitivamente no es lo mismo el aprendizaje a distancia que presencial”.
Derivado de la responsabilidad que implica el tema de salud, los accesos a salones se dieron aplicando la sana distancia, colocando a estudiantes separados con los pupitres dentro del salón. Asimismo, durante lapsos en clases se realizó la sanitización de estos espacios por lo que los alumnos tuvieron que salir a esparcirse para complementar los cuidados.
En algunas escuelas, cada alumno y alumna llevó un kit sanitizante, donde portaron pañuelos, toallas, cubrebocas y alcohol en gel para la limpieza continua de pupitres, una medida obligatoria para el acceso que buscaron también como refuerzo, para garantizar el cuidado de estudiantes con fines de continuar con este modelo durante el año.
Entre frío y sueño, es que fueron ingresando los estudiantes a sus salones acompañados del personal docente para este inicio de clases en el que se espera vayan incorporándose más escuelas con el paso del tiempo, pues luego de casi dos años las dificultades de aprendizaje y el rezago de estudiantes ha obligado a clases presenciales, toda vez que la escuela no son solo datos e información, sino convivencia y socialización.