La Diócesis de Querétaro celebrará la XXVII Jornada Mundial del Enfermo con una celebración litúrgica que se realizará el 10 de febrero en la Basílica de Nuestra Señora de Dolores de Soriano, informó el vocero de la Iglesia queretana, Martín Lara Becerril, quien reconoció la importancia de este evento para el cual el papa Francisco publicó un mensaje en el que recordó a la Santa Madre Teresa de Calcuta.
Destacó que esta celebración es para todos aquellos que padecen alguna enfermedad y desean fortalecerse en Cristo, así como para quienes se dedican a atender a algún paciente y desean encomendar su servicio e implorar la fortaleza en el ejercicio de su labor.
“Recordemos que esta tarea de estar junto a los enfermos nos recuerda aquel momento en el que Cristo va cargando con su cruz padeciendo, y se deja ayudar por el Cirineo, y recordar que el dolor humano es un dolor salvífico cuando se une a la cruz de Cristo y a los padecimientos del señor Jesús”, afirmó Lara Becerril.
Mencionó que en el mensaje que el papa Francisco dio para los participantes de la jornada, resaltó la labor de Teresa de Calcuta, quien fue un modelo de caridad que hizo visible el amor de Dios por los pobres y los enfermos.
En este contexto, el vicario de la Diócesis de Querétaro indicó que en el marco de la jornada del enfermo, la pastoral de la salud realizará un encuentro diocesano dirigido a todos los agentes entregados al servicio de atención a enfermos, el cual tendrá lugar el 3 de febrero en el Aula Magna del Seminario Conciliar de Nuestra Señora de Guadalupe de Querétaro.
Resaltó que el voluntario es un amigo desinteresado con quien se puede compartir pensamientos y emociones, por tanto a través de la escucha, es capaz de crear las condiciones para que el enfermo pueda recuperarse, por tanto este tipo de encuentros contribuyen a brindar ayuda y consuelo.