La regidora de Morena en el Municipio de Querétaro, Ivonne Olascoaga Correa, rechazó los ajustes al acuerdo sobre el usufructo del polideportivo de San Pedro Mártir, en el que el gobierno capitalino invirtió más de 50 millones de pesos y se construyó durante la administración anterior.
Señaló que la empresa privada REPSANA S.A de C.V que tiene el espacio en usufructo, ahora pidió la autorización de otorgar este derecho a una asociación nueva, conformada exclusivamente para la operación del polideportivo, porque “faltan 10 millones de pesos para echarlo a andar”.
“Es un polideportivo nuevo y dicen, los que están pidiendo el usufructo, que es una asociación, que faltan 10 millones de pesos para poderlo echar a andar. No es justo que un inmueble, un derecho al deporte, a la cultura, al sano esparcimiento, que se construyó con dinero de los ciudadanos, se dé a un particular para que lo usufructúe”, señaló.
En un comunicado, subrayó que “quien puso la infraestructura, el terreno, la construcción, la alberca, lo hizo con los ingresos de los ciudadanos. Dirán que es legal porque es una subcontratación, sí, pero no es justo, ni la nueva asociación ni de dónde deviene este nuevo acuerdo, por eso voté en contra”.
De acuerdo con los documentos que se mostraron a los regidores, REPSANA contará con el 99% de las acciones del usufructo, mientras que la nueva asociación tendrá el 1% de las acciones, pero contará con el respaldo de la asociación mayoritaria, que brindará el apoyo logístico y material.
“Este particular está iniciando con el negocio puesto. En este nuevo acuerdo se hace una nueva asociación que va a respaldar la primera que pidió el usufructo, esta nueva asociación que se hizo exprofeso para este polideportivo tiene el 1% de las acciones, pero cuenta con el apoyo logístico y material de la asociación que tiene las mayores acciones”, explicó.
La construcción del polideportivo inició a mediados de 2020 y concluyó en la segunda mitad de 2021, pero en diciembre de ese mismo año, el cabildo aprobó por mayoría, que las instalaciones se dieran en usufructo, porque se necesitaba “personal especializado y mantenimiento constante”.
El pasado 11 de octubre, el cabildo aprobó, también por mayoría, que se hicieran ajustes para que el espacio quede en manos administrativas de una nueva asociación que se creó para ese fin, con la integración de dos empresas.
