Los agentes de las fuerzas del orden heridos en las protestas contra la condena a líderes independentistas en Cataluña son 289, de los cuales dos permanecen hospitalizados, según ha anunciado el gobierno español este viernes.
La mayoría de estos heridos (226) fueron ya contabilizados en el balance oficial de 593 atendidos del 14 al 20 de octubre por el Sistema de Emergencias Médicas (SEM), del gobierno regional de Cataluña.
Informaciones erróneas circulan en redes sociales asegurando que el total de 600 heridos fue a consecuencia de la actuación policial.
En total, 289 policías fueron heridos en los enfrentamientos contra manifestantes violentos que lanzaron adoquines, cócteles molotov y bolas de acero, de los cuales 154 son Mossos d'Esquadra (policía regional catalana), 134 son policías nacionales y otro más, un agente de otro cuerpo, según la portavoz del gobierno español, Isabel Celaá.
El 22 de octubre, el SEM emitió un comunicado que indica que 593 personas habían sido atendidas, de las cuales 226 eran policías (116 Mossos d'Esquadra y 110 policías nacionales).
La diferencia entre la cifras de policías heridos dadas por SEM (226) y la aportada por el Gobierno (289) se debe a que varios agentes fueron atendidos en centros de salud privados, según confirmó el ministerio del Interior a la AFP.
La entidad independentista Asamblea Nacional Catalana (ANC) publicó un comunicado en inglés y francés el 22 de octubre en el que aseguraba que, según el departamento de Salud del gobierno regional catalán, "había 579 heridos fruto de la violencia policial".
Por su parte, el centro de derechos humanos Irídia afirmó en un tuit del 20 de octubre: "¡Casi 200 detenidos, 22 encarcelados y cerca de 600 heridos, el balance represivo de seis días de protestas en Cataluña!".
Según la portavoz del gobierno, "más de 200 personas han sido detenidas", de entre los cuales "134 adultos y 15 menores fueron puestos a disposición judicial y 31 han ingresado en prisión" preventiva. De los 15 menores, "14 quedaron en libertad vigilada y uno ingresó en un centro de internamiento".
Del lado de los manifestantes, cuatro han perdido la visión de un ojo, tres de los cuales continúan hospitalizados en estado grave, según la responsable del departamento de Salud catalán, Alba Vergés.
