/ sábado 3 de junio de 2023

¡Hola!, me llamo Lele

La muñeca otomí va más allá de ser una embajadora que viaja por el mundo dando a conocer el trabajo artesanal del estado, para muchas mujeres en cada puntada van sus sueños, muchos rotos, otros con esperanza… 


La muñeca Lele, la que en el idioma otomí es “bebé”, se ve por todos lados y en muchos artículos, no sólo por territorio mexicano, ahora también le llaman “la muñeca viajera”, pues ha recorrido prácticamente todo el mundo en su papel de embajadora en la XXXIV Reunión de Embajadores y Cónsules 2023. Pero su nacimiento va más allá, no se podría englobar en una sola historia, pues en cada muñequita hay emociones, sueños, esperanza y también el dolor de las diferentes manos con las que son creadas.

¿QUIÉN ES LELE?

Originaria del municipio de Amealco, Querétaro, fue nombrada Patrimonio Cultural del estado de Querétaro el 18 de abril de 2018, pero su nacimiento fue hace varias décadas, incluso se piensa que estas muñecas eran realizadas con arcilla, palma y cabellos de maíz, que además servían para colocarlas en los sepulcro de los niños para alejar los malos espíritus. A su llegada los españoles, estas muñecas eran parte de la venta de juguetes los cuales traían de Europa y eran compañeras de escaparate de las muñecas de porcelana.

Los queretanos hemos visto a las artesanas otomíes caminar ofreciendo sus muñecas por los diferentes andadores del Centro Histórico, desde finales de la década de los 80’s; sin nombre, sin redes sociales para ser presumidas, en cada muñeca se plasmaba desde aquellos ayeres, el sueño de una mujer que trataba de colocarlas para poder llevar el sustento a su casa.

Lele no fue inventada, fue creada y a su vez comercializada por un grupo de mujeres de las comunidades amealcenses de San Idelfonso Tultepec y Santiago Mexquititlán, quienes se unieron para hacer una cooperativa y poder vender su producto; así, con esfuerzo y mucha fe, la muñeca de los sueños recibió su nombre Lele, y sí, era su “bebé”, una recién nacida que albergaba en cada una de sus trenzas, sus listones y vestidos, las ilusiones de todas estas artesanas, que adquieren la destreza para elaborarla de generación en generación.

Diferentes en tamaño, colores, pero todas con un pedazo del corazón de su creadora. Foto: Tamara Medina | Diario de Querétaro

ARTESANAS

Tras el éxito, la muñeca ha sido tristemente plagiada y se puede ver prácticamente en todo el territorio mexicano, donde cada región la asume como propia, incluso los chinos hicieron lo propio y Lele se vendía en tiendas de prestigio, obteniendo jugosas ganancias que a quien menos llegaban era a sus creadora. Desde hace un tiempo, Lele fue registrada, aunque para muchos esta acción no fue muy bien vista pues a decir de la vox populi, no garantiza la remuneración económica, ni el reconocimiento al trabajo de las mujeres que las forman.

Aunque la muñeca ha recorrido países como Londres, China, Australia, Estados Unidos, incluso recientemente estuvo de mundialista en Qatar, para algunas artesanas queretanas esa fama no ha llegado a su vida, continúan siendo marginadas, perseguidas y violentadas en todos sus derechos, “Yo soy de una comunidad de Santiago Mexquititlán, vengo a Querétaro desde el jueves, a veces llego el miércoles cuando hay descansos y vendo mis muñecas, luego traigo 50 depende, pero si es difícil venderlas, hay mucha competencia y no nos dejan estar en un lugar, entonces al andar “acarreándolas” por todos lados se maltratan o se ensucian y ya no las quieren”, dice Jacinta Nicolás.

“Los inspectores se ponen muy bravos, no dejan que estemos en ningún lado, en tiempos de festejos te dan un lugar, pero casi siempre es a personas que están en algún grupo, pero yo no ando con nadie, porque luego hay que andar pagando y ni es gente del rancho, luego se quedan hasta con nuestro dinero”, explica Juana María, quien con sus dos niños caminan por la calle de Madero, esperando vender aunque sea una de sus muñecas o los prendedores y carpetas que lleva en una pesada canasta y que con ese dinero pretende comprar alimento para sus hijos.

“No se gana mucho, todo ha subido, la tela, el listón y las ventas no son buenas, hay muchas que venden y ya pocos son quienes compran, o luego te dicen qué cuanto es lo menos, si está difícil. Cuando bien me va me llevo como 1000 pesos, pero eso no es siempre”, dice Romana, quien aprovecha la platica para sentarse en una de las jardineras del Jardín Guerrero, pero siempre buscando no ser vista por algún inspector que pueda quitarla.

➡️ Si quieres recibir las noticias en tu Whatsapp, envía la palabra ALTA

Si, es muy contrastante la historia, pues mientras la embajadora de las artesanas es recibida en diferentes países por celebridades, sus creadoras, quienes les dan forma, las visten y le ponen un pedacito de su corazón, siguen siendo ciudadanas de segunda, perseguidas y señaladas, quienes cada día buscan no el reconocimiento, simplemente llevarse unos pesos a la bolsa para poder subsistir.

Por eso, cada que veas a una de esas mujeres caminando bajo el sol, soportando la lluvia o el frío, no dudes en comprarle a una de sus bebés sin “regatear”; podría ser un lindo detalle obsequiarle a alguien especial, dar la muñequita como recuerdo en algún evento social o empresarial, llevarla a tus amigos y familiares de regalo en tu próximo viaje, acercar a los turistas para que compren a la verdadera Lele, a la que es creada con muchos sueños y que cada moneda es un peldaño para conseguirlos.


La muñeca Lele, la que en el idioma otomí es “bebé”, se ve por todos lados y en muchos artículos, no sólo por territorio mexicano, ahora también le llaman “la muñeca viajera”, pues ha recorrido prácticamente todo el mundo en su papel de embajadora en la XXXIV Reunión de Embajadores y Cónsules 2023. Pero su nacimiento va más allá, no se podría englobar en una sola historia, pues en cada muñequita hay emociones, sueños, esperanza y también el dolor de las diferentes manos con las que son creadas.

¿QUIÉN ES LELE?

Originaria del municipio de Amealco, Querétaro, fue nombrada Patrimonio Cultural del estado de Querétaro el 18 de abril de 2018, pero su nacimiento fue hace varias décadas, incluso se piensa que estas muñecas eran realizadas con arcilla, palma y cabellos de maíz, que además servían para colocarlas en los sepulcro de los niños para alejar los malos espíritus. A su llegada los españoles, estas muñecas eran parte de la venta de juguetes los cuales traían de Europa y eran compañeras de escaparate de las muñecas de porcelana.

Los queretanos hemos visto a las artesanas otomíes caminar ofreciendo sus muñecas por los diferentes andadores del Centro Histórico, desde finales de la década de los 80’s; sin nombre, sin redes sociales para ser presumidas, en cada muñeca se plasmaba desde aquellos ayeres, el sueño de una mujer que trataba de colocarlas para poder llevar el sustento a su casa.

Lele no fue inventada, fue creada y a su vez comercializada por un grupo de mujeres de las comunidades amealcenses de San Idelfonso Tultepec y Santiago Mexquititlán, quienes se unieron para hacer una cooperativa y poder vender su producto; así, con esfuerzo y mucha fe, la muñeca de los sueños recibió su nombre Lele, y sí, era su “bebé”, una recién nacida que albergaba en cada una de sus trenzas, sus listones y vestidos, las ilusiones de todas estas artesanas, que adquieren la destreza para elaborarla de generación en generación.

Diferentes en tamaño, colores, pero todas con un pedazo del corazón de su creadora. Foto: Tamara Medina | Diario de Querétaro

ARTESANAS

Tras el éxito, la muñeca ha sido tristemente plagiada y se puede ver prácticamente en todo el territorio mexicano, donde cada región la asume como propia, incluso los chinos hicieron lo propio y Lele se vendía en tiendas de prestigio, obteniendo jugosas ganancias que a quien menos llegaban era a sus creadora. Desde hace un tiempo, Lele fue registrada, aunque para muchos esta acción no fue muy bien vista pues a decir de la vox populi, no garantiza la remuneración económica, ni el reconocimiento al trabajo de las mujeres que las forman.

Aunque la muñeca ha recorrido países como Londres, China, Australia, Estados Unidos, incluso recientemente estuvo de mundialista en Qatar, para algunas artesanas queretanas esa fama no ha llegado a su vida, continúan siendo marginadas, perseguidas y violentadas en todos sus derechos, “Yo soy de una comunidad de Santiago Mexquititlán, vengo a Querétaro desde el jueves, a veces llego el miércoles cuando hay descansos y vendo mis muñecas, luego traigo 50 depende, pero si es difícil venderlas, hay mucha competencia y no nos dejan estar en un lugar, entonces al andar “acarreándolas” por todos lados se maltratan o se ensucian y ya no las quieren”, dice Jacinta Nicolás.

“Los inspectores se ponen muy bravos, no dejan que estemos en ningún lado, en tiempos de festejos te dan un lugar, pero casi siempre es a personas que están en algún grupo, pero yo no ando con nadie, porque luego hay que andar pagando y ni es gente del rancho, luego se quedan hasta con nuestro dinero”, explica Juana María, quien con sus dos niños caminan por la calle de Madero, esperando vender aunque sea una de sus muñecas o los prendedores y carpetas que lleva en una pesada canasta y que con ese dinero pretende comprar alimento para sus hijos.

“No se gana mucho, todo ha subido, la tela, el listón y las ventas no son buenas, hay muchas que venden y ya pocos son quienes compran, o luego te dicen qué cuanto es lo menos, si está difícil. Cuando bien me va me llevo como 1000 pesos, pero eso no es siempre”, dice Romana, quien aprovecha la platica para sentarse en una de las jardineras del Jardín Guerrero, pero siempre buscando no ser vista por algún inspector que pueda quitarla.

➡️ Si quieres recibir las noticias en tu Whatsapp, envía la palabra ALTA

Si, es muy contrastante la historia, pues mientras la embajadora de las artesanas es recibida en diferentes países por celebridades, sus creadoras, quienes les dan forma, las visten y le ponen un pedacito de su corazón, siguen siendo ciudadanas de segunda, perseguidas y señaladas, quienes cada día buscan no el reconocimiento, simplemente llevarse unos pesos a la bolsa para poder subsistir.

Por eso, cada que veas a una de esas mujeres caminando bajo el sol, soportando la lluvia o el frío, no dudes en comprarle a una de sus bebés sin “regatear”; podría ser un lindo detalle obsequiarle a alguien especial, dar la muñequita como recuerdo en algún evento social o empresarial, llevarla a tus amigos y familiares de regalo en tu próximo viaje, acercar a los turistas para que compren a la verdadera Lele, a la que es creada con muchos sueños y que cada moneda es un peldaño para conseguirlos.

Local

Estrechan cooperación Ucrania y Querétaro

Recibe el gobernador Mauricio Kuri a la embajadora Oksana Dramarétska

Finanzas

SCO Aluminum emplea a 1,674

Empresa tiene seis plantas en México, de las cuales dos están en Querétaro

Elecciones 2024

Agilizará Monsalvo entrega de colonias

Con estas medidas, el candidato del PAN aseguró que busca consolidar un municipio más seguro

Local

Piden no exponer a mascotas al calor

Llaman a vigilar los signos de sobrecalentamiento, como jadeo excesivo, letargo, babeo excesivo, tambaleo o colapso

Elecciones 2024

Desarrollo demanda visión global: Chepe

Candidato plantea la creación de la Comisión Metropolitana que reunirá cuatro municipios, Estado, colegios, Asociaciones y la academia

Local

“Sientes que te estás derritiendo”: limpiaparabrisas

Narra cómo enfrenta temperaturas de hasta 37 grados trabajando en la calle