La vida se alteró durante el confinamiento por la pandemia de Covid-19, por lo que Gustavo Villegas decidió indagar en todo lo que cambió en ese tiempo, en las impermanencias y pequeñas destrucciones cotidianas. Lo hizo a través de una serie de entrevistas que después sintetizó en ilustraciones y montó dentro de una instalación.
La obra se titula Confinados, relatos de una pandemia y se encuentra exhibida en Galería Libertad, donde permanecerá abierta al público hasta el 12 de febrero.
Aunque esta proyecto sale a luz en un tiempo pospandémico, el artista asevera que cobra otra gravedad y puede servir al público para hacer memoria y sanar.
“Mirar atrás nos ayuda a sanar, así que recordar los primeros meses de la pandemia nos puede ayudar a saber qué nos pasó, cómo lo vivimos y cómo estamos ahora”, dice.
Desde hace unos años, la destrucción es tema neurálgico en la obra de Villegas, y esta es la primera ocasión que la aborda desde la cotidianidad, echando mano para ello de la ilustración.
Con el apoyo del Sistema Nacional de Creadores de Arte (2023- 2025) el autor dará continuidad a este nuevo ángulo, su nuevo proyecto girará en torno a lo ocurrido en el sismo del 2017 en la Ciudad de México.
“Me baso en un libro de Nacho Padilla, él mencionaba que las heridas mal sanadas después surgen de otra manera, y para él, que vivió el sismo del 85, tanto el arte como hablar las cosas, puede ayudar a sanar.
“Un edificio se colapsa y lo primero que se hace es tratar de levantarlo junto con toda la ruina, sin un duelo; cuando lo que necesitamos es justo eso, vivir el duelo de toda la pérdida que hubo, tanto humana como material, y no se da tiempo para ello; de ahí la importancia de hacer memoria, de hablar las cosas, de tenerlas presente”, apunta.
Simulacro del confinamiento
Confinados, relatos de una pandemia surgió de 14 entrevistas que Gustavo Villegas realizó a familiares y amigos en los primeros tres meses de pandemia. Lo que hizo fue indagar en las experiencias de cada una de las personas, y encontrar puntos en común para luego trasladarlos a 16 imágenes.
“Traté de sintetizar los relatos en una imagen, y como soy diseñador gráfico, me pareció que lo podría resolver bien en una ilustración que es casi un pictograma en blanco y negro. Tomé como referencia las ilustraciones japonesas que se utilizan a veces como instructivos, y es que las imágenes son tan abstractas que nos ayudan a comprender una idea más amplia, y eso de alguna forma fue lo que pretendí hacer con esta exposición”, detalla.
La instalación, agrega, refuerza este mismo concepto, y recrea la sensación de estar confinado.
“Todo está pensando para propiciar la sensación de encierro”, dice y asevera que su inquietud ahora como artista es generar experiencias a través de diversas disciplinas, y esta exposición es el primer paso.
El recorrido
El nuevo proyecto de Gustavo Villegas se ubica en la planta alta de Galería Libertad. Consiste en una instalación que sigue el diseño básico de las casas con rectángulos y triángulos.
“La gente hace un recorrido por un laberinto de casitas, con la intención de que se sientan dentro de ellas; las mismas obras–que se encuentran suspendidas con hilos transparentes en la estructura– miran hacia dentro para obligar, de algún modo, a entrar y generar ese circuito”, explica.
La experiencia va acompañada por audios que se pueden escuchar con ayuda de audífonos inalámbricos mientras se realiza el recorrido, o bien, a través de códigos QR que pueden ser fácilmente escaneados con el celular. La respuesta a preguntas como: “¿Te has sorprendido descubriendo detalles que antes no veías o mirando con mayor detenimiento el entorno que te rodea?”, se podrá apreciar en estos audios.
El recorrido es guiado con un flujo marcado sobre el piso de la galería y hojas de sala que indican la ubicación de las piezas.
“Últimamente he decidido no poner cédulas a las piezas como a la manera tradicional, prefiero trabajar con hojas de sala donde viene la descripción de cada obra y un mapa que nos ayuda a ubicarlas”, comparte el autor.
Como parte de esta exposición, Gustavo Villegas encabezará una visita guiada y un conversatorio el 2 de febrero a las 18:30 horas; estará acompañado por el escritor y dramaturgo queretano Imanol Martínez, quien fue el encargado de interpretar esta nueva propuesta en el texto de sala.
“En las ilustraciones no vemos la representación del espacio sino las experiencias de habitarlo –los rastros o consecuencias del tiempo no en los muros sino en las personas que viven en ellos y, sobre todo, en sus historias.
“Cada una de estas 16 piezas dan cuenta de la manera en que reinterpreta las experiencias: Un astronauta flotando para representar la gravedad cero del confinamiento, la nueva velocidad de las cosas, el abrazo que significaron las plantas de interior; una jaula como representación de la forma en cómo se trastoca el deseo de estar en casa al convertirse en un mandato; o entre otras cosas, la representación, a lo David Lowry, de la afección a las personas o sitios, un recordatorio de que toda historia de apego es una historia de fantasmas”, describie el dramaturgo en el texto.
Cabe mencionar que en todas ilustraciones aparece una suerte de álter ego del autor, “para de esta manera jugar a vivir todas las historias que le compartieron `ser la representación de la memoria ajena´”, explica Imanol.
Las piezas de Confinados, relatos de una pandemia están a la venta. Para mayor información, consultar la página gustavovillegas.com