Aunque la obra de teatro Ni princesas, ni esclavas escrita por Humberto Robles se estrenó hace más de diez años, los estereotipos de género que acechan a sus protagonistas siguen presentes en nuestra sociedad, creando expectativas sociales sobre cómo debe comportarse una mujer en la actualidad.
Producida por Galatsia Teatro, esta puesta en escena cuenta con las actuaciones de Alejandra Segovia, Estefanía Méndez y Mónica Durán, quienes interpretan a tres mujeres: la intelectual, la ama de casa y la trabajadora sexual, cada una con complicaciones muy particulares en sus vidas.
La ama de casa carece de una vida sexual satisfactoria, pasa todo el día limpiando y atendiendo a su esposo e hijos; ella misma dice en tono irónico que esa es la vida ideal, pues al fin de cuentas su esposo la mantiene y le da todo lo que necesita, así que está dispuesta a sacrificar su propia felicidad con tal de que todo se mantenga “en orden”.
La profesionista, por otro lado, está conforme con su formación académica, su trabajo de oficina y su sueldo que es bastante oneroso. Sin embargo, mantenerse en dicha posición de poder le trae problemas para conseguir un novio, pues los hombres se sienten abrumados y tal vez hasta un poco celosos de su éxito.
La trabajadora sexual también enfrenta sus propias complicaciones, y en su testimonio dignifica esta labor enlistando todas las dificultades por las que debe pasar con tal de que a su familia no le falte nada, como dormir con hombres que muchas veces resultan desagradables.
Alejandra Segovia, quien también es directora de la compañía, refiere que con esta obra se ponen sobre la mesa temas difíciles de abordar, aunque claro, con cierto toque de comicidad.
“La obra nos habla de tres mujeres muy distintas que cuentan las ventajas y desventajas de ser mujer en estos tiempos. Con esta obra queremos hacer ruido, que estos temas se escuchen, y más en Querétaro que la sociedad es un poco reservada ”.
Estefanía Méndez Bocanegra, coincide en que Ni princesas, ni esclavas es un medio para que el público se cuestione cuáles estereotipos aún se mantienen sobre las mujeres. Y por si acaso alguien del público no los había notado, las protagonistas se los harán ver a través del sarcasmo, la risa y la ironía.
“Podemos hacer una reflexión de que a pesar de todos los años y todo lo que ha transcurrido y la lucha por los derechos de las mujeres, el día de hoy seguimos cuestionándonos ¿Dónde estamos? ¿Qué hemos hecho? ¿Qué patrones seguimos repitiendo? y también cómo estereotipamos a cada mujer. La comedia siempre nos lleva a la reflexión y nos permite aligerar estos temas que si bien son fuertes, a través de la risa reflexionamos en qué punto estamos y hasta dónde hemos llegado con la lucha de todas las mujeres”.
Mónica Durán agrega sentirse contenta de formar parte de la obra, pues asevera que los personajes que interpretan son la voz de muchas mujeres que inevitablemente se verán identificadas con alguna de las situaciones presentadas sobre el escenario.
¿Dónde ver la obra?
Ni princesas, ni esclavas se presentará los días 20, 21, 22 y 29 de octubre en el Foro la Chimenea de la Antigua Estación del Ferrocarril, a las 20:00 horas. Los boletos tienen un costo de 100 pesos y pueden adquirirse en taquillas del foro. La obra está dirigida a un público mayor de 15 años.