Con la crisis económica y deportiva a todo lo que da, los Gallos tendrán que buscar en este mercado invernal jugadores que sean libres, que vengan a préstamo o bien que estén de remate, ya que las arcas del Club no cuentan con dinero suficiente ni para solventar los salarios en su totalidad de la plantilla actual.
Con adeudos de casi dos meses a jugadores, cuerpo técnico y trabajadores del Club, Grupo Caliente tendrá que saldar esos pagos para poder iniciar el próximo torneo además de buscar reforzar al que fue el peor equipo del torneo con tan solo 9 unidades cosechadas en el Apertura 2022.
Mauro Gerk y Rodrigo Ares de Parga se encuentran analizando cuáles serán las posiciones a reforzar y queda más que claro que la portería y la delantera deberán ser las prioridades para el próximo torneo, ya que la delantera erró demasiados goles y en la portería no hubo un arquero que tuviera la titularidad absoluta.
Más de dos meses tienen para planear el torneo pero el verdadero gran problema es el tema económico, ya que al contar con pocos recursos se verán en la necesidad de esperar las “sobras” de otros clubes, incluyendo los Xolos de Tijuana y Dorados de Sinaloa que pertenecen también a Grupo Caliente, e ir al mercado sudamericano a buscar jugadores en calidad de libres o de remate.
Pinta un mal futuro para el Club de cara al 2023, la única buena noticia es que los Gallos ya podrían tener a sus aficionados a partir de enero y así generar todos los ingresos que perdieron tras los lamentables hechos del 5 de marzo.
