La llegada más esperada por los niños está a punto de suceder, pues después de un largo viaje por fin los Reyes Magos visitarán cada hogar, dejando los regalos que han pedido en sus cartas los pequeños; pero hay algo que desde hace varios años Melchor, Gaspar y Baltasar están pidiendo en favor del medio ambiente y esto es: ¡por favor, no nos envíes tu carta en globo".
En entrevista exclusiva para Diario de Querétaro estos mágicos personajes, nos platicaron que están muy preocupados, pues por estas fechas donde se supone todo debe ser felicidad la madre naturaleza sufre por los estragos de la contaminación que genera el uso desmedido de globos que son aventados junto con las cartas. "Se que son muy bonitos los globos, hay de distintos colores brillantes, pero la verdad hacen más daño que bien y la Madre Naturaleza, ya nos reclamó", menciona Baltasar.
Y es qué los Reyes nos contaron que estos globos son inflados con helio y se pueden desplazar hasta 3 mil kilómetros en un día, por lo que no es raro que lleguen al mar, al bosque, se queden atrapados en los árboles, incluso en casas donde habitan animalitos que se los puedan comer y por desgracia morir ahogados.
"Es muy triste, saber que por enviarnos sus cartitas, pueden pasar estas cosas, ¡recuerden!, no sólo un niño manda globos, son millones y esa carga daña enormemente al medio ambiente y a la biodiversidad. Hay que tomar en cuenta que cada globo está elaborado de poliuretano, polímeros sintéticos, como el tereftalato de polietileno (PET), de microfoil o poliamida, o de látex, además de contener varios químicos nocivos", refiere Melchor muy preocupado.
Un dato muy interesante que nos dieron los Reyes y que se debe tomar en cuenta es que un globo de poliuretano tarda 450 años en degradarse, mientras uno de látex de tres a cinco meses, pero si este cae en el agua serán años y dado a su alto grado de químicos dañan con ello suelos y aguas; un globo metálico estará más tiempo inflado y tardará en consecuencia más tiempo en degradarse.
Por ello este año los reyes piden algo muy especial para todos los niños:
"Tamara, venimos a decirles a los pequeños que se retome la tradición de dejar el zapato debajo del árbol de navidad o en el nacimiento; a nosotros nos gusta verlo muy limpio con su carta y es mejor cuando lo dejan de lado de una rebanada de rosca y leche muy fría", dice entre risas Gaspar, quien para la hora de la entrevista ya tenía hambre y sin duda estaba ansioso de comer todo lo que los niños les dejan en señal de agradecimiento por los obsequios recibidos.
"Ya somos viejos y aunque somos Magos luego son tantas las cartas que se nos olvida a quién pertenece el globo, que si te decimos un secreto luego no lo vemos porque se desvía y por ello hay niños que no reciben lo que pidieron. Nosotros nos guiamos por el zapato mágico, al verlo sabemos a quién pertenece, qué tan bien se portó su dueño en todo el año, si hizo sus tareas, fue obediente con sus papás y compartió con sus hermanos, primos, amigos y con otros niños que no tienen dinero. El zapato que dejan cada 5 de enero se convierte en mágico, como una bola de cristal, ahí sabemos todo, ¡pero todo, eh! y así vamos viendo qué regalos poner a cada uno. ¡No hay pierde", cuenta Gaspar quien es interrumpido por Melchor que le indica que tienen que marcharse, pues hay que acomodar los regalos, dar de comer a sus animales, que por cierto también agradecen por el agua que les dejan los pequeñitos.
Así que, amigos de Diario de Querétaro ya saben la recomendación de Melchor, Gaspar y Baltasar: poner su zapato mágico en lugar de aventar el globo. Sería genial que me enviaran su foto con el zapato mágico y sus obsequios, para poder hacérsela llegar a nuestros buenos amigos los Reyes Magos.
Su foto junto a su nombre lo pueden enviar al correo: g.medina@diariodequeretaro.com.mx
