Uno de los retos principales en cuanto a los impuestos ecológicos será la certeza de que se destinen a acciones en favor del medio ambiente, de acuerdo con el presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), Óscar Hale Palacios.
El líder del gremio señaló que los constructores están conscientes de la necesidad de este tipo de medidas; no obstante, es necesario prevenir un efecto inflacionario en el sector por su aplicación.
“Otro reto importante es ver cómo estos recursos que se obtengan a través de estos impuestos ecológicos sean destinados precisamente para una remediación ambiental y el tercer punto es también ver cómo esto no genera un efecto inflacionario en los productos terminados de la construcción”.
De acuerdo con Hale Palacios, actualmente ya hay bancos de materiales que cobran un 30% a los residuos ahí depositados, sin embargo, el presidente de CMIC detalló que el reto es que estas empresas lo reporten a la autoridad.
Respecto a la normativa que establece las consideraciones para la reutilización de los materiales, el líder del gremio explicó que no puede aplicarse al no existir todavía un centro integral de residuos.
“No se puede todavía ejercer su totalidad de la norma, hasta que no exista el centro integral de residuos”.
El titular de la Secretaría de Desarrollo Sustentable ha señalado que el resto de las consideraciones contempladas en la norma deben ser cumplidas por el gremio constructor, mientras se construye el centro referido.
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Entre las consideraciones que se están analizando para su edificación, se encuentra la distancia promedio con las obras en proceso, puesto que la norma aprobada en la entidad establece que no debe estar a más de 20 kilómetros de distancia, con la finalidad de evitar que el traslado de los materiales genera más contaminación.
