Después de un año de ausencia, Los Tigres del Norte volvieron a Querétaro con un solo objetivo: hacer rugir el Estadio Olímpico. Familias, parejas y grupos de amigos se reunieron durante la noche del sábado para recibir a la agrupación sinaloense.
El código de vestimenta estaba implícito: sombreros vaqueros, algunos con lentejuelas, otros de gamusa, y jeans. Desde las 18:00 horas los alrededores del recinto estaban inundados por fanáticos deseosos de pasar una velada llena de baile.
Pese a que la cita era a las 21:00 horas, el concierto no arrancó hasta pasadas las 22:00 horas. Algunos usuarios en las redes sociales opinan que el retraso se debió a la pelea del Canelo contra Munguía, misma que culminó momentos antes de que la agrupación se presentara sobre los escenarios.
Los Tigres del Norte cuentan con más de 50 años de trayectoria musical, por lo que su música se ha convertido en el soundtrack de generación tras generación. Por ello, entre el público podías ver desde adultos mayores hasta jovenes, todos con un amor por la banda y sus letras.
La respuesta al llamado fue increíble, con el paso de las horas seguían llegando y llegando personas. Inclusive algunas personas se asomaron desde el Hotel Mirabel, ubicado a un costado del Estadio Olímpico, o se quedaron a escuchar desde la Alameda.
Hace un dos, Jorge, Hernán, Luis y Eduardo Hernández -integrantes de la banda- recibieron una lamentable noticia en pleno concierto en Querétaro. Durante el espectáculo se les fue notificado que su madre, Consuelo Angulo de Hernández, había sido trasladada al hospital, donde posteriormente fallecería. Por lo que, para la banda, el presentarse en Querétaro era revivir unos de los momentos más dolorosos de su carrera.
Ante este detalle, el público les dedicó un minuto de aplausos para externarles su cariño antes de que ellos se presentaran sobre el escenario. Una vez que fue el tan esperado encuentro, comenzó el momento del baile.
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Durante el concierto interpretaron sus más grandes éxitos: "La Puerta Negra", "Quiero volar contigo", "Ni parientes somos", "La Manzanita", "Golpes en el corazón", y "Contrabando y traición".
