Hoy, el camino de la cinta Sujo podría decirse que es de éxito, hace unos días fue reconocida con el Gran Premio del Jurado en la Competencia Internacional de Ficción en el Festival de Cine de Sundance 2024, sin embargo, no todo fue felicidad a la hora de producirlo.
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Así lo compartieron las escritoras y directoras del largometraje Astrid Rondero y Fernanda Valadez quienes aseguraron que, en una ocasión, durante su etapa de grabaciones, se enfrentaron cara a cara con el crimen organizado.
“Nos quisieron básicamente privar de nuestra libertad con armas largas y fue una experiencia donde se puso a prueba, para Fer y para mí, nuestra capacidad de mantener la calma, más aún sabiendo que contábamos con un equipo de personas que dependían de nosotras”, afirmó Astrid en entrevista.
Este episodio se desarrolló en el hotel donde se hospedaban, en el estado de Guanajuato, es decir, que no afectó alguna locación, ni mucho menos puso en peligro al equipo que trabajó detrás de cámara del filme. Ambas lamentan este hecho, sin embargo, aseguraron que recibieron el apoyo del estado y las autoridades para que no escalara más el problema.
“Por suerte tuvimos inmediato el apoyo de la guardia civil y del estado y eso nos permitió salir adelante”, dijo Astrid.
“Guanajuato es un estado que hace unos años sentíamos bastante seguro y ahora todos sabemos que, tristemente, es uno de los estados con mayores índices de homicidio doloso y de desapariciones y sí tuvimos un encuentro con un grupo criminal que afortunadamente no pasó a mayores, pero ahora sí que (nos pasó) como a cualquier ciudadano en este país que se enfrenta a la violencia”, agregó Fernanda.
“Sujo”, protagonizada por Juan Jesús Varela y coproducida por México, Estados Unidos y Francia aborda la historia de un joven que queda huérfano luego de la muerte de su padre a manos de la delincuencia. Su crecimiento está rodeado de este mundo, él deberá decidir si seguir los pasos de su padre y formar parte del narcotráfico o cambiar esa vida, pues él tiene la intención de ingresar a la universidad.
La trama se prestaba para que se pudiera filmar en una zona controlada por el crimen organizado, sin embargo, prefirieron no exponerse.
“No filmamos en tierra caliente por las complicaciones que implicaba, esa zona es de imposible acceso, se han vuelto zonas de silencio, pero decidimos ir a Guanajuato y a una comunidad rural que conocemos de mucho tiempo, donde tenemos una relación muy entrañable, cercana con la comunidad.
“Gran parte de nuestra particularidad de filmar en zonas que a veces están calientes, es que somos un crew principalmente conformado por mujeres y eso es muy positivo porque es más difícil que haya una confusión de que estemos haciendo algo que se considere inapropiado, pero es la realidad del país, los cineastas tenemos que aprender a lidiar con ella en espera de que en el futuro las cosas mejoren”, aseguró Astrid.
“Sujo” nació mientras ambas coescribían su anterior película “Sin señas particulares”, por la que ganaron ganar cinco premios Ariel y reconocimientos a nivel internacional.
“A nosotras sí nos tocó mucho escuchar las historias de los chicos de algunas de las comunidades donde fuimos a hacer una especie de casting, nos saltaba a la vista que eran comunidades en las que los jóvenes estaban en riesgo de ser parte del crimen organizado, las oportunidades eran muy pocas, para muchos de ellos, su otra opción o alternativa es la migración y durante ese tiempo estuvimos leyendo una serie de reportajes, crónicas y tuvimos la fortuna de que en nuestras manos cayera ‘Levantones: Historias reales de desaparecidos y víctimas de narco’, (del periodista asesinado) Javier Valdez Cárdenas y yo creo que nos tocó mucho esa forma tan humana de relatar la vida de víctimas y perpetradores por igual.
“Todos fueron víctimas de una ausencia de Estado y fue de ahí que nos pusimos a pensar ¿qué necesitaría un niño en una condición de estas?, de haber nacido en una comunidad rural, en donde está muy penetrado el narcotráfico, ¿qué necesitaría para salir de un círculo de violencia?, y de esa pregunta surgió Sujo”, expresó Astrid.
Ellas crearon un equipo integrado en su mayoría por mujeres, esto con el objetivo de brindar oportunidades a colegas que lo necesitan. Esperan que en la Ciudad de México, así como en Guanajuato, las autoridades apoyen a las producciones con elementos de seguridad para salvaguardar su integridad.
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“Es necesario contratar seguridad para las producciones porque es muy fácil que alguien pueda atacar a una producción”, enfatizó Astrid.
Por el momento, Sujo se encuentra en un recorrido por festivales, está próximo a presentarse en el Göteborg Film Festival en Suecia; aún no hay fecha de estreno en México, pero se prevé que esté disponible para el verano.
Por otro lado, ambas preparan una serie documental que aborda el tema de la violencia contra la mujer y trabajan en su primera película en idioma inglés.
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