Las tradicionales celebraciones del Equinoccio de Primavera en el pueblo mágico de Bernal celebran su 30 aniversario, luego de dos años de ausencia derivado de la pandemia por Covid-19 en el municipio de Ezequiel Montes, donde cientos de personas se hicieron presentes para disfrutar de una serie de eventos de música, danza, rituales y espectáculos para este fenómeno astronómico.
Del 18 al 21 de marzo, este pueblo mágico fue sede diferentes actividades entre las que destacan el desfile de primavera, la inauguración del 30 aniversario del equinoccio, la danza Pies Negros, el ritual por la Sahumadora para los escaloneros, un espectáculo pirotécnico y de espejos en la cúspide de la Peña, así como recorridos en cuatrimoto y guías turísticos.
Con un fuerte operativo por elementos de la Policía estatal y municipal, la Guardia Nacional, así como ambulancias, bomberos y unidades de Protección Civil, se mantuvo el orden del lugar y el cumplimiento de los protocolos de salud, guiando las decenas de automóviles y autobuses turísticos para una mejor afluencia de tráfico.
"Hay mucha gente estos días y a nosotros nos conviene porque sale más dinero. Yo soy de aquí y tengo 40 años vendiendo semillitas y aunque ya no dejan subir a la peña se pone muy bonito todo esto del equinoccio y la toma de energía que hace la gente", indicó Doña Sabina, habitante de Bernal.
Bernal es un pueblo de origen virreinal envuelto en leyendas y tradiciones. Caracterizado por la longevidad y calidez de sus habitantes, los bernalenses tienen un promedio de vida de 93 años, cualidad atribuida a la energía que emana de la colosal peña y su clima, razón de que en marzo de cada año el Equinoccio de Primavera tenga un aura peculiar entre la población y se realice en este sitio.
Con turistas de todas partes de la República e internacionales fueron partícipes de cantos de meditación budista en el jardín principal, las danzas Pies Negros en la explanada de la capilla de las cruces y Rayo de Luna en los paradores, la participación del Grupo Xaha, además de música tradicional española y de huapango, entre otras actividades familiares y una serie de negocios de venta de comida y artesanías de la localidad.
Asimismo, se implementaron medidas de seguridad tal como la prohibición de venta de alcohol en todos los establecimientos y tiendas misceláneas, donde hubo "ley seca" durante el periodo de realización de dicho evento, esto con la finalidad de brindar las condiciones de seguridad y operatividad óptimas a los residentes y visitantes al evento.
Finalmente, bajo un sol intenso es que el público asistente a este evento recorrió las distintas calles de este pueblo mágico, donde pudieron degustar las tradicionales gorditas hechas de maíz martajado, los dulces típicos de la región, nopales en penca con guisado de chorizo o carne de res y una serie de bebidas preparadas sin alcohol, como parte del viaje para vivir la experiencia culinaria que ofrece Bernal.
