Los procesos de auditoría aplicados a las universidades públicas deberían ser similares a los empleados en los organismos paraestatales, de acuerdo con la rectora de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), Teresa García Gasca.
La rectora aseguró que es normal que queden dudas luego de que se lleven a cabo las auditorías, además de que la manera en la que se audita a la institución no corresponde a las características de las universidades, puesto que siempre han solicitado que se les apliquen los procedimientos que se llevan a cabo para evaluar el funcionamiento de los organismos paraestatales. No obstante, la rectora aseguró que ya se están atendiendo las situaciones señaladas por la Entidad Superior de Fiscalización.
“Las auditorías son siempre una oportunidad de mejora administrativa, siempre habrá procedimientos y cosas que mejorar en términos administrativos, más en la universidad en donde tenemos miles de movimientos al año, miles en muchas áreas”.
La académica explicó que las auditorías que se aplicaron fueron dos, una de tipo procedimental y la otra documental y únicamente se aplicó a una muestra de alrededor de 166 millones de pesos, provenientes de recursos propios, pero que como resultado de las auditorías no se determinó resarcir ninguna cantidad.
“No tenemos ninguna situación resarcitoria, al contrario, todas son administrativas y todas se las dejaron al órgano de control interno y la universidad estará llevando el seguimiento”.
García Gasca aseguró que únicamente se le hicieron trece observaciones a la institución por parte de la Entidad Superior de Fiscalización (ESFE) y dieciocho recomendaciones y por ninguna es necesario resarcir recursos públicos.
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“La muestra real, auditada, es de 168 millones de pesos, por lo que no corresponde a los 204 millones de pesos que se publican en la nota en principio, posiblemente hubo falta de pericia en entender el análisis, porque son documentos muy técnicos”.
