Un grupo de trabajadores de Seguridad Universitaria de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ) ha alzado la voz para denunciar una serie de abusos y amenazas laborales que han enfrentado.
José Enrique Reséndiz Pájaro, portavoz de este grupo de trabajadores inconformes, denunció desacuerdos con la asignación de bases, ya que sienten que éstas han sido otorgadas a grupos cercanos a la dirección de Seguridad Universitaria, en detrimento de otros empleados con más tiempo en la institución.
"Hay un desacuerdo con el otorgamiento de las bases, siendo beneficiados principalmente los grupos cercanos a la dirección de Seguridad Universitaria; hay una persona que tiene pasadita de un año y otro compañero tiene cuatro años aquí, y ellos fueron beneficiados con base".
Uno de los problemas más destacados es la violación de las regulaciones laborales en lo que respecta a los horarios de trabajo, pues en el departamento de Seguridad Universitaria se les exige trabajar más horas de las correspondidas, así como la obligatoriedad de doblar turnos.
Además, los trabajadores han enfrentado situaciones de acoso. Uno de los supervisores ha tomado fotografías de los empleados sin su consentimiento, lo que es considerado una violación de sus derechos laborales.
"Todos hemos sufrido un tipo de acoso por parte de un supervisor, que no sabemos si tiene el puesto oficializado; nos ha acosado, llega y te toma fotos y violenta nuestro derecho. Nos exigen traer uniformes cuando tiene dos años sin dárnoslos. Se nos obliga a trabajar doble turno y si no quieres o puedes te ponen a disposición de recursos humanos".
➡️ Si quieres recibir las noticias en tu Whatsapp, envía la palabra ALTA
Otras quejas incluyen la falta de uniformes y calzado de trabajo durante más de dos años, a pesar de que es responsabilidad del empleador proporcionar estas herramientas.
La gravedad de estas denuncias ha llevado a los trabajadores de Seguridad Universitaria a solicitar la intervención de la secretaria del Trabajo, Liliana San Martín Castillo, y del titular de la Defensoría de los Derechos Humanos en Querétaro (DDHQ), Javier Rascado Pérez.
