JOHANNESBURGO (AP) — A pesar de lo atractivo que resulta entremuchos turistas pasear sobre un avestruz, dos importantes granjasen Sudáfrica ya dejaron de ofrecer dicho servicio en respuesta ala preocupación de algunos clientes por el bienestar de lasaves.
Pero una tercera granja en Oudtshoorn _un poblado sudafricanoconocido como la "capital mundial de las avestruces"_ dijo queseguirá ofreciendo los paseos porque sus propias regulacionesincluyen restricciones de peso para los turistas. Asegura que lasaves no pasan incomodidades mientras trotan con alguien sobre ellomo durante unos 10 segundos.
El debate es parte de una discusión más amplia en África ymás allá sobre la ética de la interacción humana con ciertosanimales usados para entretenimiento y otros fines. Las granjas deavestruces aseguran que montar estos animales es diferente dehacerlo con un elefante, por ejemplo, el cual necesita serentrenado.
También consideran que no se compara con la convivencia concachorros de león, cuyo tiempo en cautiverio les impide aprendercómo sobrevivir en estado salvaje.
Los paseos en avestruz, alguna vez considerados una granatracción turística, ahora son vistos con cada vez menos agradopor muchos clientes, dijo Douglas Bester, dueño de la granjaCango, en Oudtshoorn, la cual dejó de ofrecer paseos a finales defebrero.
"Es una demanda del mercado", dijo Bester, quien agregó que "esmás ético enseñar a los niños a amar a las aves que sentarse enellas y reírse cuando alguien se cae".
Oudtshoorn se ubica en la árida región de Karoo, donde en elsiglo XIX abrieron las primeras granjas de avestruces y secomerciaban sus plumas. Antes de la Primera Guerra Mundial, elvalor comercial de las plumas estaba en el cuarto lugar de lasexportaciones sudafricanas, detrás del oro, la lana y losdiamantes.
Además de las plumas, hay mercado para los huevos, carne y pielde avestruz.
Desde hace 15 años, la granja Safari comenzó a restringir elpeso de un visitante para subirse a un avestruz y finalmente acomienzos de mayo dejó de ofrecer los paseos, dijo el encargado demarketing, Billy Engelbrecht.
En contraste, la granja Highgate sigue ofreciéndolos perorestringe el peso del jinete a 74 kilos (163 libras), dado que unave de este tamaño puede cargar hasta 90 kg (198 libras), dijo elpropietario Johan Keller, quien aseguró en un email: "nuestrasaves son felices".