BOTÍN. Está más muerto que Elvis, pero la lucha por el cadáver del PRI se arrecia y es cosa de pesos y centavos. Nada de ideologías ni liderazgos. Así como lo vemos de jodido, el tricolor recibe cada mes, cuando menos, 1 millón 462 mil pesos por prerrogativas a partidos, que suman 17 millones 545 mil pesos al año. Y es que el monto, de por sí apetitoso, rinde mucho más en una dirigencia famélica como la de Juan José Ruiz que ni siquiera cubre rentas de los comités municipales y sólo paga sueldo a él y a los 4 amigos que le quedan en la vida.
PLANES. Tras esa suma, y tras la campaña que puede pagarse con el dinero que reciben todos los partidos, incluso los hipócritamente austeros de Morena, es que va la diputada federal panista-priísta-neoaliancista (hasta ahora) María Alemán en su proyecto de dirigencia “alterna” a la de Ruiz en el agonizante PRI.
VORACES. Las austeridad, gratuidad y digamos que la sencillez de algunos representantes de Morena caen muy bien entre los regidores de otros partidos, especialmente del PRI y el independiente en el cabildo capitalino, que sí venden caro el amor en las sesiones. Nadie sabe para quién trabaja, se burlan algunos.