Con gran éxito se llevó a cabo el cambio de imagen que el programa "Acá entre nos, las cosas como son", Diario de Querétaro y Juanis Herrera de Silver Makeup, obsequiaron a las mamás queretanas, en el concurso "Un regalo para mamá".
La dinámica se dio a conocer el pasado 7 de mayo, donde a través de la emisión se invitó a mujeres madres de familia a participar en un cambio total de imagen, donde se pidió contar su historia y porque debían ser ellas las ganadoras.
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Varias hijas, hermanas, nietas y amigas participaron contando las historias de grandes mujeres que sin duda han sido referente de madres guerreras, amorosas y que con su gran corazón han logrado salir adelante en el bendecido "trabajo" de ser mamás.
María Guadalupe Aguiñon Castañon, no dudo en contar la historia de su mamita Teresa Castañon Benítez, quien contó lo grandiosa que es su mami, como desde siempre apoyó a ella y sus hermanos, muchas veces haciendo a un lado su propia felicidad o comodidad, pero complacida de que sus hijos pudieran desarrollarse y alcanzar los sueños que ella por convicción tuvo que hacer de lado, "Siempre me mandaba mi tortita, para que yo me la comiera en el recreo y no dejará de lado mis sueños", escribió en el post, Lupita, además de relatar que pese a su vida complicada su mami siempre saco fortaleza de su noble corazón por lo que ella quería darle ese regalo, pues Tere lo merecía y sería algo para regresar un poco de lo mucho que ha dado a sus hijos, su comentario llegó a 509 reacciones siendo la ganadora.
Lupita y Juanis quien se encargaría de hacer el sueño realidad se pusieron de acuerdo para acudir al Studio Silver Make Up y hacer la magia, donde no solamente se "enchularia" por fuera, la plática y el reconocimiento que tuvo Tere durante las casi 5 horas que duró la sesión, también le alegraron el alma.
El proceso fue tardado pero muy divertido, buscar el mejor tono para su cabello con el que resaltará sus facciones, el maquillaje y el reconocimiento a la gran labor que ha realizado como el pilar de su casa, hicieron que Tere se sintiera consentida, admirada y muy querida, pues gracias a su carisma se supo ganar a todos los presentes quienes fueron testigos de la gran transformación.
Cuando finalmente se vio al espejo Teresita no pudo evitar las lágrimas, pues no podía creer que ese reflejo fuera ella, esa mujer que ha estado guardada y que no lograba salir, ahí se dio cuenta que ella podía hacer lo que se propusiera y que este sería el primer paso para comenzar a trabajar con su autoestima, empezar a apapachar a Tere la mujer y seguir siendo la madre amorosa para Lupita y sus hermanos.
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Agradecemos la confianza de todas las participantes por compartirnos las admirables historias de esas heroínas que día a día luchan, se enfrentan, sacan la garra por su hogar y familia, se caen sin doblegarse, se levantan con más fuerza, tienen ese bello corazón capaz de amar a cada uno de sus hijos… Mamás creo que les llaman.
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