Ayer se dieron a conocer los resultados de “La venganza de la basura”, una convocatoria promovida por la Secretaría de Cultura Federal en la que resultaron seleccionadas 26 compañías de todo el país, incluyendo las agrupaciones locales La Miscelánea y La Gaviota Teatro.
Impulsada en Tlaxcala desde 2019, “La venganza de la basura” es una iniciativa de La Colmena: Centro de Tecnologías Creativas que surge de la premisa de que, ante el creciente uso de dispositivos tecnológicos, se requiere un planteamiento crítico sobre su consumo, tiempo de vida útil, y el impacto social y ambiental que causan por su generación y acumulación.
“ Bajo esa premisa, esta iniciativa busca replantear la lógica de obsolescencia programada (entendida como aquella programación del fin de la vida útil de un producto) y obsolescencia percibida (considerada como una estrategia de consumo, en la cual se induce al consumidor a considerar que un producto deja de ser útil ante la aparición de nuevos modelos o tendencias), por una de reciclaje, entendiendo este como una opción de independencia creativa a partir de la generación de productos elaborados con desechos tecnológicos”, se puede leer en las bases.
La convocatoria fue divida en dos categorías; la primera consistió en la producción y exhibición de piezas a partir del reciclaje de basura tecnológica, y la segunda, en la generación de contenido transmedia para la divulgación de la ciencia y la tecnología a través del arte; categoría en la que fueron seleccionadas las dos compañías queretanas.
"Breve tratado para desarmar un celular-narrativa visual con objetos" es el título del proyecto que La Miscelánea Teatro desarrollará con este apoyo, que parte de una serie reflexiones sobre el uso y deshecho de los teléfonos celulares y que busca plantear un protocolo de reciclaje de estos artefactos.
Bajo un concepto de teatro de objetos, la compañía bosquejará una propuesta escénica en torno al impacto del consumo tecnológico sobre la ecología.
De acuerdo con el director de la agrupación, Ernesto Galán el trabajo se llevará a cabo durante cuatro meses y en él participarán Jessica Ramos, Eduardo Laguna y Juan Pablo Ocampo.
Además, la propuesta incluirá cápsulas transmedia que abonarán a la temática central del proyecto.
El director también informó que próximamente harán una colecta de residuos electrónicos – como cargadores de dispositivos móviles, baterías y cables– con lo que construirán una maqueta de desechos.
Por su parte, La Gaviota Teatro desarrollará “Todo empieza por algo”; un proyecto didáctico que se valdrá de sus icónicos títeres Leonardo y Mona Lisa, para desentrañar un misterioso caso en torno a un desastre ecológico que podría estar relacionado con los deshechos tecnológicos.
Raúl Ángeles Flores, dramaturgo y actor de esta compañía, refirió a DIARIO DE QUERÉTARO que solo una pila llega a contaminar hasta 600 mil litros de agua; situación que ha motivado a todo el elenco a usar su arte como plataforma para visibilizar este tipo de problemáticas, así como a traducir la información en un lenguaje asequible y sensible, de tal forma que la población sepa qué hacer con los deshechos tecnológicos.
Finalmente, el dramaturgo aseveró que trabajarán en la realización de material digital que difundirán en las plataformas digitales tanto de su foro teatral como de la Secretaría de Cultura Federal.
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