La leche de avena es una de las leches vegetales más populares, además ayuda a la flora intestinal para reducir el colesterol y la avena es un cereal con un gran aporte de carbohidratos, grasas y proteínas.
Si eres intolerante a la lactosa, esta bebida es perfecta, es mucho más saludable que las que pudieras conseguir en supermercados, gracias a sus ingredientes naturales, además la puedes beber fría o caliente, cómo prefieras, la preparas en 15 minutos y necesitas muy pocos ingredientes.
Esta leche de avena contiene una gran concentración de vitaminas, minerales, calcio y ácidos grasos esenciales.
Ingredientes
-1 taza de avena
-4 tazas de agua
-Endulzantes naturales y extras al gusto
Para el endulzante puedes usar miel de abeja, dátiles, piloncillo o azúcar mascabado y como extras, vainilla y canela.
Preparación
Previamente debes de remojar la avena durante 6-8 horas.
1. Vierte la avena remojada junto con su agua re remojo, más una taza de agua, elije un extra y un endulzante y licúa todo hasta crear una mezcla homogénea.
2. Colar. Se puede colar en manta de cielo, la puedes conseguir en cualquier tienda de telas, o una bolsa para lechada o en un colador.
El tiempo en vida en refrigeración es de 48 y hasta 72 horas.
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