En promedio 100 personas llegan cada mes a los módulos del Instituto Municipal de las Mujeres de Querétaro (IMM) para recibir terapia legal o psicológica que se brinda de forma 100% gratuita, indicó Elda Yolanda Hernández Salcido, directora del organismo.
Sufrir violencia intrafamiliar es la principal causa por la que una mujer recurre a ese servicio del IMM, punto en el que resaltó que cada vez más mujeres son capaces de reconocer que no es normal sufrir agresión y que cuando lo expresan es que inmediatamente buscan apoyo para resolver el problema.
“Tenemos asesorías jurídicas y psicológicas en las delegaciones, tenemos pláticas en las colonias o procesos de sensibilización en las colonias, ya sea rurales o urbanas… tenemos gente diario en las terapias”.
Invitó a todas las interesadas en recibir alguna de las dos terapias a simplemente acercarse a alguno de los módulos fijos del IMM en las delegaciones, que operan de 9:00 a 15:30 horas y agregó que la atención también se brinda en los módulos itinerantes del Instituto.
El módulo fijo se encuentra en Epigmenio González, mientras que los itinerantes ofrecen su servicio los martes en las delegaciones Félix Osores y Centro Histórico, los miércoles en Carrillo y Cayetano Rubio, los jueves en Santa Rosa y Josefa Vergara, y los viernes nuevamente en Félix Osores y Centro Histórico, en el mismo horario.
“Inmediatamente los atienden, es una atención integral para establecer alternativas y que la mujer decida, de acuerdo a los pros y los contras, que ella considera (hacer), de acuerdo a su situación”.
Dijo que, de manera adicional, se realizan diferentes cursos gratuitos orientados a empoderar a las mujeres, pues para exigir sus derechos primero deben conocerlos.
A la par, continuó, se les brindan cursos de capacitación, unos orientados a quienes desean ser emprendedoras, para que sepan cómo gestar sus proyectos e incluso la forma en la que pueden gestionar recursos federales, estatales o municipales para financiarlos.
Otros cursos, continuó, se planearon para capacitarlas, a fin de que sean contratadas en una empresa.
“Vamos llevándola, poco a poco, a fortalecerla de una manera psicológica hasta llegar a conocer sus necesidades; no todas las mujeres tienen una necesidad económica: algunas quieren ser emprendedoras y otras quieren trabajar en un espacio, ¿qué hacemos? Se les proporcionan las dos… se les dan cursos con instituciones certificadas, para que ellas lleven ese documento y accedan a un trabajo”, resaltó al finalizar.
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