/ martes 23 de junio de 2020

Remedios Solidarios contra la pérdida de empleo

En nuestro país se han perdido en los últimos meses poco más de 12 millones de empleos como resultado de la pandemia y la desaceleración económica que mantenemos desde hace un par de años. Además, de acuerdo al INEGI, el total de empleadores que han dejado la actividad productiva asciende a poco más de medio millón. En su mayoría son microempresas que no han podido resistir el embate del confinamiento y que hoy han dejado de producir y de generar empleo dificultando aún más el panorama de la recuperación económica mexicana.


Por ello, desde Coparmex hemos hecho un llamado al gobierno federal a realizar acciones conjuntas y urgentes que permitan revertir la pendiente de decrecimiento y/o estancamiento en la que nos encontraremos, generando una propuesta de Remedios Solidarios que compromete a patrones, gobierno y trabajadores en una solución que procura preservar empleos en tres modalidades: 1)Salario Solidario, 2) Seguro Solidario y 3) Bono Solidario.

Uno: El Salario Solidario es una medida de amplio uso a nivel mundial que ya opera en 54 naciones del mundo y que propone mantener las plazas laborales compartiendo temporalmente la responsabilidad de su pago entre los actores mencionados, de tal manera que el patrón paga una proporción del salario, el gobierno aporta otra y el trabajador acuerda recibir una proporción ligeramente menor del mismo. El modelo excluye al personal que recibe hasta 3 salarios mínimos.

La medida se focaliza en las empresas que no fueron clasificadas como “esenciales” y que se han visto obligadas a mantener sus operaciones en pausa. Esta medida contribuiría de manera clara a contener el despido de trabajadores formales en el país.

Dos: El Seguro Solidario es un mecanismo de apoyo inmediato para todos los trabajadores formales que hayan perdido sus empleo entre el 15 de marzo y el 30 de septiembre del presente, y que equivale a un salario mínimo general (3,696.6 pesos) recibido por 6 meses como máximo.

Con el Seguro Solidario los trabajadores desempleados podrían acceder a un ingreso mínimo vital que les permitiría respetar el confinamiento al compensar una parte de los ingresos que han dejado de recibir.

Tres: El Bono Solidario es un incentivo a la creación de empleo formal que invita al gobierno a contribuir por tres meses con una proporción del salario del trabajador que sea contratado en el período que va de julio a noviembre del presente año.

El apoyo gubernamental se determinaría a partir del número de nuevas plazas generadas en la empresa con respecto al mes anterior al que se solicita el primer apoyo por contratación y, a la vez, el patrón se compromete a conservar el empleo de los trabajadores de nuevo ingreso al menos por seis meses.

Financieramente la propuesta tiene un costo menor al impacto que generaría en la economía dichos niveles de desemple. El Salario Solidario tendría un costo estimado del .07% del PIB. El seguro solidario tendría un costo de 0.1% del PIB considerando que se brindaran apoyos a 1.5 millones de trabajadores formales que perdieron su empleo. Y el Bono Solidario costaría al erario 0.025% del PIB si se estableciera una meta de creación de 300 mil empleos formales.

En resumen, se haría más con menos, empleando menos del 1% del PIB en un plan de reactivación del empleo que rescataría no sólo la productividad, sino la economía familiar de millones de mexicanos. Un uno por ciento que es muy inferior al 7% del PIB que trabajadores y patrones aportan anualmente a las hacienda pública por pago de ISR.

No hay medida contracíclica más urgente, y no hay gasto público más justificado.

En nuestro país se han perdido en los últimos meses poco más de 12 millones de empleos como resultado de la pandemia y la desaceleración económica que mantenemos desde hace un par de años. Además, de acuerdo al INEGI, el total de empleadores que han dejado la actividad productiva asciende a poco más de medio millón. En su mayoría son microempresas que no han podido resistir el embate del confinamiento y que hoy han dejado de producir y de generar empleo dificultando aún más el panorama de la recuperación económica mexicana.


Por ello, desde Coparmex hemos hecho un llamado al gobierno federal a realizar acciones conjuntas y urgentes que permitan revertir la pendiente de decrecimiento y/o estancamiento en la que nos encontraremos, generando una propuesta de Remedios Solidarios que compromete a patrones, gobierno y trabajadores en una solución que procura preservar empleos en tres modalidades: 1)Salario Solidario, 2) Seguro Solidario y 3) Bono Solidario.

Uno: El Salario Solidario es una medida de amplio uso a nivel mundial que ya opera en 54 naciones del mundo y que propone mantener las plazas laborales compartiendo temporalmente la responsabilidad de su pago entre los actores mencionados, de tal manera que el patrón paga una proporción del salario, el gobierno aporta otra y el trabajador acuerda recibir una proporción ligeramente menor del mismo. El modelo excluye al personal que recibe hasta 3 salarios mínimos.

La medida se focaliza en las empresas que no fueron clasificadas como “esenciales” y que se han visto obligadas a mantener sus operaciones en pausa. Esta medida contribuiría de manera clara a contener el despido de trabajadores formales en el país.

Dos: El Seguro Solidario es un mecanismo de apoyo inmediato para todos los trabajadores formales que hayan perdido sus empleo entre el 15 de marzo y el 30 de septiembre del presente, y que equivale a un salario mínimo general (3,696.6 pesos) recibido por 6 meses como máximo.

Con el Seguro Solidario los trabajadores desempleados podrían acceder a un ingreso mínimo vital que les permitiría respetar el confinamiento al compensar una parte de los ingresos que han dejado de recibir.

Tres: El Bono Solidario es un incentivo a la creación de empleo formal que invita al gobierno a contribuir por tres meses con una proporción del salario del trabajador que sea contratado en el período que va de julio a noviembre del presente año.

El apoyo gubernamental se determinaría a partir del número de nuevas plazas generadas en la empresa con respecto al mes anterior al que se solicita el primer apoyo por contratación y, a la vez, el patrón se compromete a conservar el empleo de los trabajadores de nuevo ingreso al menos por seis meses.

Financieramente la propuesta tiene un costo menor al impacto que generaría en la economía dichos niveles de desemple. El Salario Solidario tendría un costo estimado del .07% del PIB. El seguro solidario tendría un costo de 0.1% del PIB considerando que se brindaran apoyos a 1.5 millones de trabajadores formales que perdieron su empleo. Y el Bono Solidario costaría al erario 0.025% del PIB si se estableciera una meta de creación de 300 mil empleos formales.

En resumen, se haría más con menos, empleando menos del 1% del PIB en un plan de reactivación del empleo que rescataría no sólo la productividad, sino la economía familiar de millones de mexicanos. Un uno por ciento que es muy inferior al 7% del PIB que trabajadores y patrones aportan anualmente a las hacienda pública por pago de ISR.

No hay medida contracíclica más urgente, y no hay gasto público más justificado.