La crisis sanitaria y económica golpea a la industria de la construcción y a cinco meses de cerrar el año, un 10% de los 400 ingenieros colegiados en Querétaro se han declarado en suspensión de actividades, informó el presidente del Colegio de Ingenieros Civiles en el estado de Querétaro, Sergio Camacho Hurtado.
Refirió que, no obstante que la construcción en el escenario de pandemia fue de los sectores reconocidos como esenciales, el 2021 ha sido un año de trabajo limitado tanto en obra pública como privada.
La obra ha estado marcada por el tema de sanidad y económico y por otra parte un año electoral que terminó por impactar los niveles de ocupación de las empresas como de los profesionistas independientes que en promedio registran una actividad de trabajo actual de entre el 40 y 50% de su capacidad total.
En estas condiciones, “del padrón de 400 ingenieros un 10% están prácticamente parados, se han declarado en suspensión de actividades”, externó.
Camacho Hurtado, comentó que en estos momentos la obra pública se encuentra prácticamente parada, “en ceros” por el periodo de transición del gobierno y por otro lado una obra privada con menor desarrollo dada la incertidumbre económica para continuar o impulsar el desarrollo de proyectos.
En entrevista el presidente del Colegio de Ingenieros Civiles del estado, dijo que “la incertidumbre económica de nueva cuenta genera retrasos y frenos. Hay muchas empresas y profesionistas que hacen hasta lo imposible para mantener la subsistencia a más de un año de pandemia, aseguró.
Sergio Camacho, insistió que el gremio esperaba mejores condiciones para la parte última del año, sobre todo por el relevo en el gobierno y la petición de inyección de recursos en obra que a su vez impacte la certidumbre en el tema privado, sin embargo, la tercera ola de contagios advierte un cierre de año incierto, concluyó.
