Despedida
El hombre está hecho de ciclos. Y éstos se cumplen de manera irremediable e inevitablemente. Uno deja huecos, como deja su alma en las cosas que hace, pero también se lleva algo. En este caso, me llevo experiencia, y la gratitud de quienes ayudaron para que esta colaboración periodística fuese posible.
Como una especie de premonición, me encontré hace días el libro de Fernando Savater, “figuraciones mías”, que inicia con un texto titulado “La penitencia del texto” a manera de prólogo. Savater dice, leo textual: “Ahora que el artículo periodístico clásico entra en una fase crepuscular, acosado e incluso sustituido por blogs y otras fórmulas propiciadas por internet, quizá sea oportuno dedicarle una reflexión como despedida anticipada, casi cómo réquiem. (…) en el artículo periodístico, señala Savater hay cosas que parecen contradictorias, porque permite mucha libertad pero por otro gran disciplina. “La libertad es evidente en la elección del tema, de la perspectiva desde la que enfocarlo, del tono (irónico, severo, desenfadado, etc.) con el cual tratarlo”.
En mi caso, la intención de mis artículos es y será compartir con los lectores (los radioescuchas) comentarios y elementos de divulgación que contribuyan a formar criterios para la discusión política o cultural de la vida cotidiana, a ras de suelo. Aunque en ocasiones, con cierto dejo de arrogancia involuntaria, lo confieso, y es porque citó otra vez a Savater “un buen escritor de artículos es un acelerador de partículas imaginativas y racionales, lo cual excluye el mero capricho autocomplaciente”.
Diario de Querétaro me abrió sus puertas hace un poco más de cinco años para compartir y experimentar el ejercicio del artículo periodístico, con el nombre de “Diálogo Universitario”, entendiendo este espacio lleno de pluralidad dada mi extracción académica desde la Universidad Autónoma de Querétaro, en el que pude expresarme con diversos temas y asuntos contando con la más amplia libertad que la prensa libre se práctica en México.
Estoy agradecido primeramente con el director de esta casa editorial Mario León, y desde luego a quienes han intervenido en este trayecto, a José Luis Rodríguez, con quien inicie las primeras intervenciones, en los controles técnicos a Pepe Gómez, a Ángel Santos, a Fabrizia Ruiz, a Hugo, sin dejar de mencionar las finas atenciones de Alicia Vázquez, y desde luego a ti Sergio Magaña, un excelente compañero e inmejorable anfitrión del micrófono.
En esta época de la vida nacional se necesita llevar a cabo una serie de reflexiones desde distintos niveles, con diversos ángulos y pluralidad de posturas, para encontrar la centralidad de las acciones. La crítica y la autocrítica será un eje fundamental para la construcción del diálogo entre los principales actores de nuestra vida. Una vida democrática que hay que reconstruir y volverla a levantar. Estoy convencido que el periodismo tiene mucho que aportar en la generación de las ideas sobre el destino del país, y las voces encontraran eco en la prensa convencional y digital. Hasta entonces.
@manuelbasaldua
